Día 1 - ADVIENTO. Aprendiendo a esperar al Redentor - a podcast by IDD Fuente de Amor

Desde que soy cristiano he presenciado las controversias que giran en torno a la celebración de la navidad, donde algunos la consideran como una fiesta de tradición cristiana y otros como una fiesta pagana. Personalmente he tenido diferentes opiniones al respecto. Y mi intención no es hacer una apología sobre la navidad, entiendo que no hay porque polemizar porque esto hace parte de la libertad que tiene cada cristiano, y creo que de celebrarla ningún de creyente lo haría malas intenciones. No obstante, hoy día estoy sumamente convencido que si decidimos celebrar la navidad deberíamos hacerlo con tal responsabilidad y sobre todo con una conciencia plenamente informada, con un sentido cristiano sobre lo que celebramos. Lamentablemente cuando los creyentes desean celebrarla no pasan de compartir una comida en familia y dar regalos entre ellos el 25 de diciembre, Momento muy bonito y especial, pero yo quiero ir más allá de eso.

¿Entonces, que hacemos para que la navidad tenga un sentido diferente a como el común de las personas la celebra? Hace pocos años conocí que antes de la fiesta de la navidad o noche buena hay una celebración muy importante de tradición cristiana que precede a la navidad, esta celebración es llamada «Adviento». ¿Por qué es tan especial el Adviento? La palabra viene del latín «adventus Redemptoris», que significa «venida del Redentor». El adviento se trata primordialmente de la primera venida de Jesucristo hace dos mil años. El Adviento es una tradición que se desarrolló en el transcurso de la historia de la iglesia como un tiempo de preparación para el día de navidad, que nos recuerdan todos los sucesos anteriores al acto maravilloso de la encarnación de Dios. En el adviento reflexionamos durante 25 días antes de la navidad sobre como el nacimiento de un niño era tan esperado por la humanidad, colocando todas las esperanzas en el mesías prometido que habría de nacer.

Además, estoy convencido que tener en cuenta la celebración de adviento preparará nuestro corazón para una entendida celebración de la navidad. y debe ser así, puesto que el nacimiento de Jesús es el nacimiento más transcendental que el planeta haya presenciado, de manera que la navidad requiere un corazón que pueda atesorar este regalo. No olvidemos que Jesús no vino a la tierra como normalmente lo recordamos, es decir en a la cruz, el vivió todas las etapas que un ser humano experimento, el nacimiento, el desarrollo y la muerte. Pero en esta ocasión queremos recordar reflexionar y prepáranos para aquella promesa anunciado por lo profetas.

Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Isaías 9:6

Acompáñame en esta travesía en la cual estoy deseoso de que Dios traerá una firme perspectiva sobre salvador.

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